sábado, 10 de septiembre de 2011

LLAVE MAESTRA


"Nuestra convicciones más arraigadas, más indubitables, son las más sospechosas. Ellas constituyen nuestro límite, nuestros confines, nuestra prisión". ORTEGA Y GASSET.
Siempre he visto a lo largo de mis años de estudiante obras destacadas en negrita en los libros de literatura. Siempre. Eran entonces, en su mayoría, cofres cerrados sobre los que unos hablaban de su valor después de haberlos abiertos y la mayoría , por una ignorante inercia, hablaban de su valor porque aquellos que los habían abierto afirmaban que lo tenían.
Hace ya algún tiempo y por curiosidad, decidí coger de la estantería el libro de Ortega al que siempre aludía mi profesor somnoliento de literatura en el instituto, tan adormecido que nunca tuvo las ganas de levantarse y darnos las llaves que abriesen ninguno de aquellos pequeños baúles.
El hallazgo de Ortega ha sido bueno, como casi todos los hallazgos, por minúsculos que sean. Con respecto al arte, reflexiona en este pequeño ensayo de manera, a mi parecer, tremendamente lúcida.

- Actúa la obra de arte como un poder social que crea dos grupos antagónicos, que separa y selecciona en el montón informe de la muchedumbre dos castas diferentes de hombres.
- No se trata de que a la mayoría del público no le guste la obra joven y a la minoría sí. Lo que sucede es que la mayoría, la masa, no lo entiende.
- Ver el jardín y ver el vidrio de la ventana son dos operaciones incompatibles: la una excluye a la otra y requieren acomodaciones oculares diferentes.(...) La mayoría de la gente es incapaz de acomodar su atención al vidrio y transparencia que es la obra de arte; en vez de esto, pasa a través de ella sin fijarse y va a revolcarse apasionadamente en la realidad humana que en la obra está aludida.
- Una misma realidad se quiebra en muchas realidades divergentes cuando es mirada desde puntos de vista distintos.
- Lograr construir algo que no sea copia de lo "natural" y que, sin embargo, posea una substantividad, implica el don más sublime.
- Toda obstinación en mantenernos dentro de nuestro horizonte habitual significa debilidad, decadencia de las energía vitales. El horizonte es una línea biológica, un órgano viviente de nuestro ser; mientras gozamos de plenitud el horizonte emigra, se dilata, ondula elástico casi al compás de nuestra respiración. En cambio cuando el horizonte se fija es que se ha anquilosado y que nosotros ingresamos en la vejez.
- El arte no puede consistir en el contagio psíquico (...) El llanto y la risa son estéticamente fraudes.
- El poeta aumenta el mundo. (Autor viene de auctor, el que aumenta).
- La metáfora es la potencia más fértil que el hombre posee. (...) El rayo es un metro de carpintero y lo árboles infolies del invierno escobas para barrer el cielo. El arma lírica se revuelve contra las cosas naturales y las vulnera o asesina.
- La metáfora es el más radical instrumento de deshumanización.
- Pensar es el afán de captar mediante ideas la realidad.(...) Pero entre la idea y la cosa hay siempre una absoluta distancia. Lo real rebosa siempre del concepto que intenta contenerlo. La idea queda siempre como un mísero esquema, como un andamiaje con que intentamos llegar a la realidad.
(...)